Erase el año del 2006, desde cuando emprendimos lo que en ese momento era una simple iniciativa entre tres colegas con la finalidad de compartir una de nuestras grandes pasiones en común, la DERMATOLOGIA. El lugar, San Salvador, el motivo... varios, no se trazó ningún objetivo, ninguna meta en específico; nos reuníamos en nuestras casas u oficinas una vez al mes sin ninguna formalidad. Se trataba de compartir nuestras experiencias y nuestras dudas en forma de conversatorio, cual fuera una charla dominical entre amigos. Los meses siguieron pasando y poco a poco se fueron sumando otros colegas que compartían la misma esencia. Eso fue inesperado pero grato a la vez, todos ellos llenaban de energía y vitalidad al grupo e hicieron posible los logros por venir.